El doctor Alejandro Sánchez llegó a Huatulco en 1995, comenzó a dar el servicio de veterinaria en el pueblo, muy pronto se dio cuenta de la necesitad que tenía la comunidad de crear conciencia sobre el buen trato y cuidado de los animales tanto salvajes como domésticos.
No podríamos decir con certeza si fue el quien encontró a los animalitos que comenzó a ayudar o si ellos lo encontraron a él, fue así como nació La Mascota Callejera, con el objetivo de proteger a los desprotegidos, de crear programas de concientización sobre la esterilización y de promover una mejor vida para todos aquellos que nos necesitan, nacimos para darles voz a quienes entre ladridos, maullidos y sonidos extraños nos gritan día a día que merecen una buena vida.
Poco a poco la comunidad se ha acercado a La Mascota Callejera, nos motiva recibir ayuda tanto de Huatulqueños por nacimiento o convicción, así como de extranjeros.
No podríamos decir con certeza si fue el quien encontró a los animalitos que comenzó a ayudar o si ellos lo encontraron a él, fue así como nació La Mascota Callejera, con el objetivo de proteger a los desprotegidos, de crear programas de concientización sobre la esterilización y de promover una mejor vida para todos aquellos que nos necesitan, nacimos para darles voz a quienes entre ladridos, maullidos y sonidos extraños nos gritan día a día que merecen una buena vida.
Poco a poco la comunidad se ha acercado a La Mascota Callejera, nos motiva recibir ayuda tanto de Huatulqueños por nacimiento o convicción, así como de extranjeros.
Han encontrado la forma de ayudar ya sea con ayuda en especie, en ocasiones monetaria, con trabajo, adoptando o con difusión.
Personas han entrado y salido de este colectivo, muchas otras permanecen, todas han aportado mientras su estancia, con su creatividad, trabajo y esfuerzo.
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